La manzanilla es una hierba medicinal junto al eucalipto que, desde inmemorial, ha formado parte en la composición de remedios y fármacos de toda clase. Su jugo ayuda a reparar la membrana gástrica, alivia los dolores articulares e incluso las enfermedades hepáticas, entre otras cosas.
Hoy queremos resolver la siguiente duda: ¿Para qué enfermedades sirve la manzanilla? Una solución completamente natural para algunos males comunes que pueden aliviarse incorporándola a la dieta.
1. Estrés y ansiedad
La ingesta de manzanilla en infusión aumenta la producción de glicina e hipurato que actúan como relajantes musculares.
No es la única cualidad que posee en este sentido: la depresión, la ansiedad o el estrés también se alivian con sus compuestos: la apigenina, que, además, ayuda a conciliar mejor el sueño y a provocar somnolencia.
2. Previene problemas de corazón
Uno de sus componentes: el flavonoides (antioxidante), es capaz de reducir la presión arterial, prevenir la arteriosclerosis y deshacer la acumulación de colesterol y triglicéridos en sangre.
3. Se recomienda durante la menstruación
Debido a sus propiedades analgésicas, antiinflamatorias y antiespasmódicas, la camomila es capaz de aliviar algunos de los síntomas menstruales más recurrentes como calambres, hinchazón o sudoración.
4. Mejora el funcionamiento de los intestinos
Sus principios activos calman calambres estomacales y ayudan a mejorar el sistema digestivo. De hecho, esta ha sido la función más clásica de la manzanilla a lo largo de la historia.
Su consumo ayuda a prevenir y curar enfermedades como la gastritis, el síndrome del intestino irritable, las digestiones pesadas, la diarrea, los vómitos, la gastroenteritis o las úlceras estomacales.
Su ingesta periódica ayuda a eliminar bacterias dañinas y a reducir la acidez de estómago.
5. Regula el metabolismo y la diabetes
Esta planta goza de numerosos años de investigación científica. Algunas de las sorprendentes conclusiones a las que ya se ha llegado son, por ejemplo, que tomada en ayunas o después de comer, la manzanilla es capaz de controlar la diabetes. Es más, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, ayuda a controlar el índice glucémico que previene daños en el páncreas.
6. Amiga de la piel
Muchos champús, lociones, cremas o geles de ducha la mencionan en sus composiciones porque gracias a sus componentes taninos y fenólicos, la piel consigue generar más colágeno y, en consecuencia, mantener su tersos y juventud más tiempo.
Además, su aplicación sobre la piel ayuda a reducir inflamaciones, irritaciones y ayuda a cicatrizar heridas.
La manzanilla es una planta con extraordinarias propiedades para la salud y de la que se puede hacer uso diariamente, tanto ingerida como en aromaterapia; siempre que no existan alergias latentes a alguno de sus componentes principales.
Una de las hierbas más antiguas del planeta, cuyos efectos son conocidos desde hace miles de años, y que continua sorprendiendo por sus extraordinarias capacidades curativas.